"Ley y Orden" (I)
-Macroserie-
Ley y Orden es como un
complejo enorme de episodios de serie del genero drama policiaco
donde caben multitud de personajes, de mayor o menor relevancia o
protagonismo dentro del amplio margen de funcionarios encargados de
hacer cumplir la ley, de investigar casos criminales y de juzgar a
los imputados.
Dentro de esta macroserie existen
varias ramas o spin offs,
desde la serie original, que comenzó en el año 1990, hasta la más
reciente temporada de la versión Criminal Intent (Acción
criminal), que data del año 2001. Estas dos ramas tienen una misma
base de acción en común, de la que hay personajes que aún perduran
desde las primeras temporadas y otros que desaparecen y más adelante
se reincorporan, entre letrados, inspectores de policía, jueces,
fiscales y hasta psiquiatras.
Existen
también la variante nacida en 1999 y que aún hoy continúa, Unidad
de víctimas especiales, y las
versiones Ley y Orden Los Ángeles y
Ley y Orden UK,
imitación llevada a cabo en el Reino Unido, nacida en 2009 y que
aquí se titula Londres: Distrito criminal.
Al parecer otra
modalidad se gestó en 2005, Ley y Orden Juicio con Jurado,
dentro de la misma línea de la original pero con distintos
personajes, que no tuvo demasiada aceptación. Un spin off más
de la saga Ley y Orden he descubierto recientemente aunque
creo que nunca vi ninguno de sus capítulos, Conviction, titulada
en España NY: Distrito Judicial.
Ley y Orden en
Nitro
En la actualidad la
cadena Nitro nos ofrece en España, diariamente de lunes a viernes
por las tardes, dos capítulos de la serie original, que comienzan
alrededor de las 5 (17h) y otros dos a partir de las 8,30 (entre
20,30 y 21h) de Ley y Orden: Acción Criminal (CI), metiendo
en el horario entre ambas otros dos capítulos de Walker Texas
Ranger.
Estas dos versiones
de Ley y Orden tienen, como decía, una misma base de acción,
desde la brigada de policía y la fiscalía de Nueva York, y
comparten personajes aunque no siempre estén todos. Sin embargo
existe una notable diferencia entre ambas variantes, mientras que en
la original hay una primera parte dedicada a la investigación
policial, siempre existe la segunda parte en la que se lleva a cabo
el proceso de enjuiciamiento de los imputados, en la cual tiene lugar
un acercamiento profesional entre los componentes del equipo
policial y los de la fiscalía, asimismo con careos entre los
representantes de la fiscalía y los de la defensa y siempre hay
intervención de escenas de juicio, con las que se da por resuelto el
caso pertinente. Pero en la versión C.I. está suprimida la etapa
judicial y el capítulo está íntegramente dedicado a la
investigación policial, si bien siempre existe un contacto con el
ayudante del fiscal en curso y en ocasiones se apoyan en algunas
secuencias de juicios que arrojan luz a la investigación.
Una constante, a
pesar de los muchos cambios llevados a cabo durante las temporadas de
Ley y Orden original, es la presencia del detective Mike
Logan, interpretado por el conocido actor Chris Noth, que a lo largo
de la serie cambia varias veces de compañero, en esta versión,
siempre masculino, y creo que es la imagen estandarte del equipo de
policía de Nueva York en la serie.
A Mike Logan le
vemos posteriormente en algunos episodios del spin off Criminal
Intent, a partir de la temporada perteneciente a 2005.
Pero la marca
visible de Ley y Orden Acción Criminal, el peso del
protagonismo de la serie durante diez temporadas en las que
percibimos un real cambio físico en la persona del mismo actor que
lo encarna, el carismático Vincent D' Onofrio, del que ya os hablé
en un post anterior, es sin duda el detective Robert Goren, que casi
siempre trabaja acompañado de la detective Alexandra Eames.
Mike Logan y
Robert Goren
Mike Logan es un
tipo duro, serio, irónico, huraño, de apariencia fría que oculta
traumas y profundos dolores; algo maleducado y desconsiderado,
apasionado en su trabajo, soltero y sin compromiso y celoso del
cumplimiento de su cometido y fiel a su brigada y a los
representantes de la ley. Conocedor de los pormenores y entresijos de
la labor detectivesca, con buen olfato y cierto grado de astucia para
la caza del delincuente, con quien suele sobrepasarse en el trato
tanto durante la investigación como durante los interrogatorios.
Mike Logan, nacido
en Nueva York en el seno de una familia de clase obrera, católica y
de origen irlandés, vivió una infancia difícil, marcada por el
abuso y el maltrato, algo que, sin duda dejó su sello para la
posteridad en la persona de Logan, un hombre que parece huir de los
compromisos familiares y la idea de formar una familia. Siempre
parece sentir más motivación en aquellos casos que implican
victimología infantil.
Si Logan suele ser
brusco y desconsiderado con las personas a quienes investiga, sean
sospechosas o no, por el contrario siempre da muestras de buen
compañerismo y fidelidad a la brigada policial hasta el extremo de
tomarse como algo personal los casos en los que hay víctimas
pertenecientes a la policía, aunque a veces sus modales y salidas de
tono le han supuesto algún que otro enfrentamiento con sus
superiores.
Robert Goren,
proveniente de un barrio de Brooklyn, no es de apariencia tan duro ni
tan frío como Logan. Algo payaso y peliculero, sin embargo es una
persona de armas tomar, de extremada inteligencia y carácter
impredecible y se muestra también como alguien carente de
sentimientos que dedica su esfuerzo a la resolución de los casos
policiales que le toca investigar, a pesar de que, conocedor del alma
humana, sabe distinguir a la perfección cuándo existe alevosía en
un crimen y cuándo el criminal obedece a trastornos de su psique, e
intenta resaltar este particular en sus interrogatorios. Goren se
complementa a la perfección con su compañera, la detective Eames;
ambos se tienen pillado el punto concomitante en sus trabajos y saben
jugar sus papeles combinando las tácticas de sus estrategias de
manera que suelen concluir en resultados satisfactorios.
Pero el punto
fuerte de Robert Goren es sin duda su, en cierto modo, maquiavélica
intervención psicológica, adornada de su extenso repertorio de
gestos y ademanes teatrales característicos, y aplicando sus
conocimientos, adquiridos en parte mediante su estudio y dedicación
y en parte debido a los problemas psíquicos de diferente índole y
etiología relativos a su familia, factor muy a tener en cuenta en
relación al comportamiento excéntrico y, a la larga, problemático,
de Bobby en el departamento donde cumple sus servicios policiales.
De dos formas
diferentes y complementarias suele Goren aplicar sus conocimientos
psicológicos: una, estudiando los comportamientos como seres humanos
en su entorno de las personas probablemente implicadas en el caso que
investiga, tanto testigos como sospechosos, y otra, interfiriendo
mediante sus excéntricos y llamativos ademanes o sus rebuscadas y
penetrantes observaciones mediante los que busca distraer o
desconcertar a su interlocutor, o incluso hacerle caer en trampas que
les suele tender, para, de esa manera, bajarles la guardia y lograr
tener acceso al punto neurálgico de su psique que a él le interesa.
Logan y Goren
juntos
Por mor del orden aleatorio aparte de repetitivo (mejor llamarlo
desorden) en que nos acerca la cadena Nitro a esta serie, los
espectadores o seguidores televisivos no tenemos las cosas claras ni
los puntos sobre las íes, ni hay dios que se aclare con el curso de
los acontecimientos que se suceden al margen de las problemáticas
independientes expuestas en cada capítulo. A fuerza de ver uno y
otro día los episodios que toquen según criterios o posibilidades
de Nitro, una ya se va familiarizando con los personajes y haciéndose
una idea de por dónde van los tiros, aunque me temo muy mucho que no
logramos llegar al meollo de la cuestión que sería el deseable si
todo se sucediera por su paso.
Pero bueno, por el momento esto es lo que hay, y he de decir que hay
capítulos muy buenos y muy interesantes, episodios que en sí mismos
ofrecen una verdadera obra completa de drama policial. Este es el
caso de un capitulazo con el que me encontré el otro día, que al
parecer pertenece a la temporada 4 de Criminal Intent,
titulado Stress Position, estrenado en 2005.
A lo largo de dicho episodio vemos cómo va evolucionando la
investigación, cómo se van descubriendo poco a poco unos entresijos
que enmascaran unos hechos graves que se están sucediendo en una
prisión y que han dado y están dando lugar a posteriores crímenes
y homicidios derivados de la problemática subyacente en la que, al
estar implicados servidores de la ley con su correspondiente
autoridad y poder dentro del establecimiento penitenciario, los
miedos, las ocultaciones, las tergiversaciones, los chantajes, las
amenazas y toda una serie de actos derivados de la corrupción, se
suceden y van poco a poco arrojando luz en la investigación de un
homicidio cuyos hallazgos en un principio aparentan deberse a unas
causas y unos móviles muy diferentes de los en realidad son. Poco a
poco la trama se va deshaciendo y se van conociendo detalles que
desmienten las conjeturas anteriores hasta que se llega al meollo de
la cuestión.
Esta complicada trama carcelaria es la responsable de que Logan y
Goren entablen conocimiento. Por aquellos juegos de magia del guión,
casualmente un ya maduro Mike Logan, que cumple servicio ahora en
otro departamento, tiene en la actualidad una novia que trabaja como
enfermera en la prisión donde se gestan los crímenes de este
capítulo. Logan sospecha, debido a la actitud de su novia, que algo
grave ocultan los muros de la cárcel y comienza a investigar por su
cuenta hasta que solicita ser trasladado al departamento donde
trabajan Goren y Eames al enterarse de que son ellos quienes llevan
oficialmente la investigación del caso y decide, mediante la
aprobación de los superiores, colaborar con los detectives Robert
Goren y Alexandra Eames, quienes en un principio lo reciben con algo
de reticencia y desconfianza debido en parte a la reputación de
Logan, pero una oportuna consulta a Van Buren los hacen cambiar de
idea y aceptar su colaboración, la cual resulta ser decisiva en la
resolución del caso.
Es una experiencia interesante observar ese primer encuentro entre
estos dos detectives de personalidades bien diferenciadas pero de
fuerte carácter, cada uno en su estilo, y verlos actuar en escenas
claves de un episodio donde la tensión es la principal protagonista.
Ambos, Logan y Goren en medio de su investigación y cuando ya casi
llegan al desenlace y han de obrar con celeridad para salvar a la
novia de Mike, que se encuentra en un peligro inminente, caen en una
trampa y quedan atrapados entre las rejas de la prisión y la amenaza
de unos funcionarios violentos y depravados que disfrutan con la
tortura y se escudan para cometer sus fechorías en sus cargos y en
sus uniformes.
La verborrea psicológica de Goren, su típica actuación plagada de
histrionismo escénico y el apoyo moral incondicional del detective
Logan, que despide odio y fuego en su mirada iracunda, consiguen
aplacar a la bestia y que los secuaces del jefe instigador desistan
de su postura y abandonen su acción criminal trabada entre rejas y
volcada de forma gratuita sobre las personas de inocentes presos
árabes que sufren condenas injustas derivadas de crueles
maquinaciones de mentes de auténticos psicópatas que se encuentran
al frente de instituciones penitenciarias.
Ley y Orden
original y Ley y Orden Acción Criminal
Sin duda ambas son
series muy bien realizadas e interesantes y no cabe duda de que hay
detrás un trabajo concienzudo en la creación de personajes bien
definidos, con características de personalidad diferenciadas, de una
idiosincrasia variada, que hace que la serie no aburra y los
episodios no parezcan siempre el mismo.
Lo malo es la forma
en que las televisiones nos ofrecen su contenido, pues, además de la
insaciable repetición de capítulos, el desorden cronológico resta
un gran aliciente al visionado de estas series, donde la evolución
de los personajes y la problemática abierta entre los diversos
protagonistas no se hace patente, entorpeciendo así la comprensión
del trasfondo serial, algo que juega un papel muy importante en su
conjunto y que, de cara al público seguidor, de algún modo nos deja
a medias, nos impide saborear el clima al completo, la tensión
existente detrás de cada caso que se presenta y la natural evolución
de los personajes protagonistas que llevan el peso de toda la trama
en la continuidad de la serie.
Alguno de estos
días tendré que recurrir a hacerme con todas las temporadas y todos
los capítulos ordenados de todas las variantes de Ley y Orden,
lo cual pienso que ha de ser una ardua tarea, pero creo que valdrá
la pena para poder acercarme a la comprensión real de la
problemática latente, de la profunda naturaleza de cada uno de los
personajes importantes o destacados y de todo lo que, en definitiva,
quiere mostrarnos la macroserie creada por Dick Wolf, quizás la
tremenda realidad que se esconde tras la ficción, donde los héroes
son de carne y hueso, con sus aciertos y sus errores, sus proezas y
sus debilidades, sus talentos y sus meteduras de pata, sus bondades y
sus maldades.
V. E.
Excelente
ResponderEliminarla ley y el oren original
ResponderEliminarhttps://www.youtube.com/watch?v=XS7nksNvH3w&t=6s